Thompson es una empresa familiar que lleva desde 1921 fabricando bicicletas en Bélgica, un país con larga tradición ciclista y en este Testmania os traemos en exclusiva el test del modelo BLADE, el tope de gama de Thompson para el 2019 y que estará disponible a partir de septiembre.
Esta preciosa bicicleta de carretera montará frenos de disco y estará disponible con ruedas de aluminio o por tan solo 500€ más con ruedas de carbono.
Estará disponible en 105, Ultegra, Ultegra Di2, Dura Ace y Dura Ace Di2, y como siempre con los colores a la carta, al gusto del cliente sin sobrecoste añadido.
El modelo que nuestro amigo Alberto Fernández ha tenido el placer de probar venía con transmisión electrónica Ultegra Di2 y unos estupendos frenos de disco Ultegra.
Un cuadro de carbono de alto módulo con construcción en monocasco con cableado interno, que encaja perfectamente con lo que demanda el mercado actual. Su horquilla absorbe perfectamente las irregularidades del terreno, a lo que también contribuyen las ruedas de la propia Thompson, las TRC FCC de perfil 40 de carbono.
Los neumáticos Schwalbe One Evolution Line han proporcionado agarre y buen rodar.
El manillar, potencia y tija corren a cargo de la propia Thompson, donde ha realiado una gran labor, dándonos unos componentes de buena calidad y estética. El sillín es un Fizik ARIONE.
Es una bicicleta diseñada para disfrutar: ha sido realmente divertido bajar un puerto y enlazar curva tras curva.
Es una bicicleta con un perfil aero pero sin descuidar las dotes escaladoras, cómoda y que permite afrontar largas jornadas sin machacar el cuerpo del ciclista. Hay que destacar su reactividad, es rígida sin incomodar y adictiva: invita a colocar las manos sen la parte baja del manillar, ponerse de pie y apretar los pedales como si no hubiera un mañana.
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